El Retargeting se ha convertido en una de las estrategias de marketing digital más efectivas que podemos emplear para optimizar nuestras campañas. Sin entrar en detalles (todavía) vamos a decirte que el retargeting consiste básicamente en mostrar un anuncio a una persona que ya ha tenido contacto previo con una marca o con sus productos.
Esta es una excelente forma de asegurarnos que los anuncios, llegan a personas que, en principio, están más dispuestas a interactuar con la marca.
Veamos un ejemplo para clarificar este tema:
Un usuario ingresa en una tienda online de bolsos, pero sale sin hacer ninguna compra y continúa navegando por otros sitios. En ellos, aparecerán anuncios de la tienda de bolsos que acaba de visitar.
¿Cómo puede ser? Pues bien, las principales plataformas de anuncios digitales, como son Facebook ads y Google Ads, permiten crear campañas en los que se muestren determinados anuncios, sólo a personas que ya hayan tenido algún tipo de contacto con el anunciante previamente.
¿Qué tan eficiente es el retargeting?
El gran potencial de una campaña de retargeting radica en que un anuncio puede ser mostrado a usuarios que tuvieron prácticamente cualquier tipo de interacción con una marca. Ya sea que haya leído una entrada en un blog, vio un vídeo de YouTube o simplemente, le dio like a una publicación de una empresa en las redes sociales.
Esto genera que un consumidor esté mucho más predispuesto a recibir un anuncio o un mensaje de una empresa. Porque, dicha persona, ya se había visto interesada en la marca previamente.
Además, las campañas de retargeting son potenciadas por el desarrollo de mejores inteligencias artificiales por parte de las plataformas de anuncios. Esto permite crear anuncios más personalizados, y llegar a públicos idóneos según el objetivo de la campaña.
Por ejemplo, si un usuario ha visitado de forma reiterada sitios que vendan bolsos deportivos, es muy probable que reciba cada vez más anuncios de bolsos deportivos mientras navega por la web o por sus redes sociales. La Inteligencia artificial y los algoritmos están en constante perfeccionamiento para reconocer estos patrones.
Beneficios de una campaña de retargeting
- Anuncios personalizados. Como ya hemos mencionado, es posible crear anuncios personalizados para cada tipo de cliente, ofreciéndole exactamente lo que busca.
- Mayor ratio de conversión. Está probado que este tipo de campañas tienen una mejor tasa de conversión que las campañas convencionales. Ya que es más probable que un usuario se sienta atraído por productos o marcas que ya conoce.
- Mejor identificación de los clientes. Lograr hacer un buen perfil de los potenciales clientes es uno de los factores más elementales a la hora de comenzar cualquier campaña de marketing. Conocer sus gustos, intereses, motivaciones. Utilizando el retargeting ya tenemos toda esa información de los clientes.
- Mayor atención. No es lo mismo para un usuario ver anuncios de marcas de las que jamás ha escuchado hablar, que de aquellas que ya conoce.
Conclusiones sobre el retargeting
Como podemos observar, el retargeting tiene grandes beneficios para las empresas que lo utilizan. Aunque, obviamente, existen algunas limitaciones muy claras.
Si una empresa recién está comenzando a operar online y todavía no tiene un público que la conozca, es muy probable que esta estrategia resultará completamente inútil. Precisamente, porque aún nadie ha interactuado con ella.
El retargeting está dedicado a empresas o negocios que ya tengan algún tiempo funcionando. O, en su defecto, que tengan contenido en internet que sea visto de forma regular.
Hay que tener en cuenta que una campaña de retargeting puede ser configurada de diversas maneras. Por ejemplo, podemos hacer que un anuncio que sea mostrado sólo a personas que ya hayan realizado una compra en nuestra tienda, o sólo a personas que hayan abandonado el carrito de compras por cualquier motivo. O, incluso, a seguidores de un determinado canal de YouTube.
Existe un abanico enorme de posibilidades para crear una campaña de retargeting. Con esto, podemos llegar a un público objetivo cada vez más específico y, de esta manera, mejorar su eficiencia. Con lo que estaremos, no solo mejorando la tasa de conversión, sino también reduciendo el Costo por Click (CPC) que pagamos por ella.